“Educando para una Internet más Segura” es el lema bajo el que se ha celebrado el Primer Congreso Internacional Menores en las TIC que ha organizado la Fundación CTIC la pasada semana y que se clausuró el miércoles día 28 de octubre en el Palacio de Congresos del Recinto Ferial Luis Adaro de Gijón. En la web http://menoresenlastic.fundacionctic.org/ se puede acceder a las principales conclusiones.
El objetivo que el Congreso ha perseguido es ofrecer claves desde los planos educativo, jurídico y social para pautar los modelos de conducta de los y las menores en su forma de relacionarse a través de la Red.
Las conclusiones más destacadas son que entre las personas adultas existe un déficit en aquellas cuestiones referentes al conocimiento de los riesgos, su incidencia real y su nivel de gravedad. Asimismo, es preciso insistir en la difusión de las medidas a adoptar en situaciones problemáticas tanto dirigidas a los padres como a los menores.
En segundo lugar, aunque es una lucha sin tregua, se ha avanzado enormemente en diferentes aspectos como son la información y la sensibilización. Hoy día existe un abanico de posibilidades impensables hace un par de años para la labor preventiva. Por otro lado, hay cuestiones que caminan, quizás necesariamente, a paso lento, como es la adecuación legal a los nuevos tiempos y la observación por parte de la industria. Tomamos buena nota para una próxima edición sobre la importancia de tener una mesa que represente a diferentes sectores de la industria. Se ha repetido en varias ocasiones la importancia que adquiere La privacidad y la identidad digital como conceptos que cobran relevancia especial en el ámbito de las redes sociales.
En la tarea educadora, el ámbito familiar es el primer implicado, pero debe realizarse en sintonía y con una apuesta sistematizada y curricular en el contexto escolar. Por otro lado, la incorporación al uso de Internet es cada vez a edades más tempranas y por ello hay que tratar de intervenir desde las primeras etapas (educación primaria e incluso educación infantil).
En quinto lugar, es necesario apoyar las nuevas generaciones para su desarrollo como ciudadanos en el nuevo contexto digital. Las soluciones “de urgencia” deben pasar a convertirse en “apuestas estratégicas”. De un navegante seguro se ha de evolucionar a un ciudadano y ciudadana digital.
Por último, la ciudadanía digital se apoya en cuatro pilares básicos: alfabetización digital, alfabetización en los medios audiovisuales, alfabetización social y alfabetización cultural.
